José
Eduardo Lagomazzini Franzón realizó sus primeros estudios en el colegio de los Padres Escolapios de
Sanlúcar. Años después, siendo sacerdote y conocido poeta, dedicó unos versos a su antiguo colegio, con motivo de la celebración de lo los cincuenta años de la llegada de los escolapios a Sanlúcar:
DE
OTRA EDAD
“Pequeño poema, evocación de mis
tiempos de alumno en el colegio calasancio de Sanlúcar de Barrameda, dedicado a
los Padres Escolapios de esta Ciudad, en las bodas de oro de la fundación de
este centro docente.”
I
EL
PATIO DE LAS PALMERAS
(ANOCHECER)
¡Qué
placidez al contemplarte siento!
Lejos
del mundo y su falaz mentira
tu
augusta calma el trovador aspira.
Y
tu ambiente de paz le infunde aliento.
El
ocaso resbala manso y lento,
mi
fatigado corazón respira,
y
tus palmas parecen una lira
que
tañe melodiosa el manso viento.
Yo
aspire de tus flores la fragancia
en
los ingenuos años de mi infancia,
en
la risueña edad de mis quimeras...
Mi
frente era más pura que el armiño,
y
en mi sereno corazón de niño
más
alta era mi fe que tus palmeras.
II
La Salve de los
sábados
¡Oh
páginas henchidas de ternura,
cuadros
llenos de luz y de colores
de
otro tiempo mejor, evocadores
de
mi primera edad, toda ventura...!
Con
nuestra voz de celestial dulzura
cantamos
a la Virgen sus loores
como
infantiles bardos trovadores
de
la madre de Dios, bendita y pura.
Me
aleje de mi pueblo idolatrado
y
volví con el pecho lacerado;
entré
en el templo de la Escuela Pía,
Y
vi a los niños, y lloré a raudales
a1
escuchar sus voces celestiales
que
la Salve cantaban a María.
Lagomazzini Franzón cursó la enseñanza media y Bachillerato en el Instituto General Técnico de Jerez de la Frontera, aunque se preparaba en Sanlúcar[5]. Ya entonces se reveló como alumno aventajado. Así lo demuestran sus excelentes calificaciones, algunas de las cuales fueron publicadas en el periódico El Guadalete de los años 1904 y 1905: en 1904 se reseñan en esta publicación los “Alumnos que en los exámenes de enseñanza privada verificados en el Instituto (de Jerez) han obtenido las primeras calificaciones”: José Lagomazzini y Franzón obtuvo Sobresaliente en las asignaturas de “Psicología y Lógica” y “Fisiología e Higiene”. Este curso, José Eduardo fue compañero de Manuel Rubio Alpresa, Eduardo Cotro Florido y José Delgado Ñudi, entre otros sanluqueños, que también obtuvieron notables calificaciones[6].
En un solemne acto celebrado en el Instituto de Jerez, con motivo de la apertura del curso 1905-1906, al que asistió el alcalde jerezano, Julio González Hontoria, se entregaron los premios correspondientes a los alumnos que habían obtenido Matrículas de Honor el curso anterior. Entre ellos se hallaba José Lagomasini (este apellido aparece con distinta ortografía en los diversos documentos y publicaciones) y Franzón, que consiguió la calificación de Sobresaliente y Matrícula de Honor en la asignatura “Ética y Rudimentos de Derecho” (la misma nota en esta asignatura lograron los alumnos Eulalia Leal y Macedo y Manuel Illanes del Río). Durante aquel curso académico, otros tres sanluqueños, procedentes del colegio de las Escuelas Pías de Sanlúcar, obtuvieron igual calificación de Sobresaliente con derecho a Matrícula de Honor: Francisco España Viejo (Nociones de Aritmética y Geometría), quien también sería sacerdote en Sanlúcar, encargado de la iglesia de San Nicolás; José Delgado Ñudi (Aritmética) y Manuel Barba Brun (Psicología y Lógica).[7]
Con diecisiete años, José Eduardo Lagomazzini solicitó ingresar en el Seminario de Sevilla, en septiembre de 1905, alegando que ya tenía cursados los estudios de bachillerato, siéndole concedida la admisión por el Rector. Abonó los derechos de examen (2,50 pesetas), realizó el examen de incorporación al Seminario el 30 de septiembre y obtuvo la calificación de “Méritus”. Una vez admitido en calidad de alumno interno, se le asignó como tutor a Joaquín Moreno.[8]
Entre 1905 y 1911, Lagomazzini Franzón cursó los estudios eclesiásticos en el Seminario Metropolitano de Sevilla, obteniendo la licenciatura en Sagrada Teología.[9] Además, entre 1911 y 1914 se graduó en Derecho Canónico en el mismo Seminario con excelentes calificaciones.[10]