Opinión Manzanilla de Sanlúcar.
Estaba muy interesada en la conferencia, organizada por el Ateneo
de Jerez el pasado día 5 de septiembre, titulada "ORÍGENES E HISTORIA DEL
VINO DE JEREZ", que fue impartida por el profesor Dr. JESÚS CANTORAL
FERNÁNDEZ, catedrático del área de Microbiología del Departamento de
Biomedicina, Biotecnología y Salud Pública de la Universidad de Cádiz.
Una vez escuchada, a través de YouTube, aunque el sonido no es muy
bueno, su contenido se puede resumir en un recorrido, que realizó el ponente,
por distintas zonas vinateras del mundo que ha visitado, entre otras cuestiones
relacionadas con sus investigaciones sobre las levaduras que componen el velo
de flor en la crianza biológica de los vinos de nuestra zona. Nada sobre el origen del vino de Jerez. No era lo que yo
esperaba, pero conferencias hay muchas.
Fue en los últimos minutos de la charla, en el turno de
preguntas, cuando me sentí realmente ofendida como sanluqueña que soy y como
modesta historiadora de nuestros vinos. A la pregunta de un responsable del
Ateneo sobre si habría que otorgarle el premio Nobel “al que inventó el sistema
de soleras”, el catedrático Jesús Cantoral respondió que no se le podía dar un
premio Nobel a los muertos. Se equivoca aquí, en primer lugar, el
conferenciante, pues se han dado dos premios Nobel póstumos a lo largo de su
historia. Aunque un error lo puede cometer cualquiera.
Acto seguido, y sin que se hubiera referido a Sanlúcar ni a su
Manzanilla en ningún momento de su intervención, el Sr. Cantoral hizo una
especie de chiste, donde pareció dar a entender que el vino Manzanilla podría
provenir, porque “yo leído bastante”, del pueblo “Manzanillo” en Huelva.