Desde el templo del Lucero: abril 2022

martes, 19 de abril de 2022

Se llama “Manzanilla de Sanlúcar” y no es un “jerez”.

 Opinión Manzanilla de Sanlúcar.

En los últimos años se está produciendo un lamentable fenómeno -desconocemos sus fines y no pretendemos elucubrar-, por el que se está confundiendo, tanto al consumidor como a otras personas interesadas, al afirmarse que el vino Manzanilla de Sanlúcar de Barrameda se llama sólo "Manzanilla" y es un tipo de “jerez”. Nada más lejos de la realidad. Es sencillamente un bulo, un desacierto. Pero un error de bulto que va en aumento.

La Denominación de Origen (D.O.) “Manzanilla-Sanlúcar de Barrameda” fue creada inicialmente en 1933 (al calor del primer Estatuto del Vino, de 26 de mayo de 1933), como así se estipulaba en las órdenes del Ministerio de Agricultura del 8 y 15 de septiembre de 1933. Sin embargo, esta primera D. O. caducó al no constituirse el Consejo Regulador de la Manzanilla-Sanlúcar de Barrameda (desconocemos las razones). Desde entonces la “Manzanilla de Sanlúcar” quedó integrada en la D.O. Jerez-Xérès-Sherry, constituida por la misma legislación en 1933 y reglamentación posterior.



Ya en 1964 (Reglamento del 15 de diciembre) se crea oficialmente la D. O. “Manzanilla-Sanlúcar de Barrameda”, desgajándose el vino sanluqueño de la D.O. “Jerez-Xérès-Sherry”. En este Reglamento se especifica que este vino “es conocido tradicionalmente con el nombre de Manzanilla”. En el primer punto del Pliego de Condiciones de la D.O. "Manzanilla-Sanlúcar de Barrameda" se expone que el "Nombre de la Denominación de Origen Protegida" es "Manzanilla-Sanlúcar de Barrameda". Esta es la verdad y lo legal.

La Manzanilla es un vino generoso propio y exclusivo de la ciudad de Sanlúcar de Barrameda (Cádiz), en cuyas bodegas urbanas debe criarse. Sus orígenes se remontan al siglo XVIII, al establecerse para su crianza el sistema de soleras, o criaderas y soleras, más tarde extendido a todo el denominado “Marco de Jerez” y otras regiones vinícolas, como Córdoba o Huelva, entre otras.

La Manzanilla de Sanlúcar es hoy el vino más vendido en el mercado nacional, entre todos los vinos del “mal llamado” “Marco de Jerez”, esto es, de las dos D.O. “Jerez-Xérès-Sherry” y “Manzanilla-Sanlúcar de Barrameda”. Ambas D.O. están gestionadas y tuteladas por un mismo Consejo Regulador con sede en Jerez de la Frontera.

En 1996, con motivo de la usurpación del nombre “Manzanilla” por una bodega de Lebrija (Sevilla) y las consiguientes denuncias ante los tribunales, finalmente el Consejo de la Unión Europea 1426/96 (CE) dictaminó que el nombre “Manzanilla” es exclusivo del vino criado en la ciudad de Sanlúcar de Barrameda, que también puede denominarse como “Manzanilla” (acepción tradicional), equiparándose a las denominaciones geográficas de vinos.


Por tanto, el Consejo europeo garantizó entonces el origen y la exclusividad del vino sanluqueño “Manzanilla”, pero no excluyó que se nombrase también como “Manzanilla de Sanlúcar” o “Manzanilla-Sanlúcar de Barrameda” (D.O.). He aquí la cuestión. Su dictamen fue garantista, pero no exclusivista.


Web Consejo Regulador


Web Consejo Regulador

El origen de esta lamentable falsedad se localiza en el propio Consejo Regulador que, tanto en su página Web como en notas de prensa, otros escritos y campañas publicitarias, se refiere a la Manzanilla de Sanlúcar con el simple término “Manzanilla” y define al vino sanluqueño como un “tipo de vino de Jerez”, como un jerez. Esto es, como si fuese un amontillado, un oloroso o un cream -llamados popularmente “jereces”-, amparados por la D. O. Jerez-Xérès-Sherry, aunque producidos en las tres ciudades del Marco: Jerez de la Frontera, Sanlúcar de Barrameda y El Puerto de Santa María. ¿A qué se deben estos equívocos cometidos y promovidos por el Consejo? Ya nos gustaría saberlo.