Ana Gómez Díaz-Franzón
Historiadora
Bella Reina, las manos agrietadas,
valen más que las manos
enguantadas,
que venden a la Patria
por dinero.
(José
E. Lagomazzini Franzón: La ofrenda del
campo, 25 de agosto de 1908).
José
Eduardo Gregorio Lagomazzini Franzón nació en Sanlúcar de Barrameda el 12 de
marzo de 1888. Fue bautizado en la iglesia mayor parroquial de Ntra. Sra. de la
O por el sacerdote José María Arocha, con licencia del cura propio, Francisco
Rubio. Actuaron como padrinos Eduardo Miquelli Botini y su tía Francisca
Lagomazzini Mariscal. Fueron testigos del bautizo Manuel Asencio y José Arocha.
José Eduardo fue confirmado el 14 de enero de 1894 en la parroquia auxiliar de
San Nicolás por el Arzobispo de Sevilla, Marcelo Spínola y Maestre.[1]
Era
hijo de José Lagomazzini Mariscal y Carmen Franzón Vicenti, naturales de
Sanlúcar, aunque de orígenes genoveses. Su padre, de profesión hortelano, fue
hijo de Felipe Lagomazzini Orcese, genovés afincado en Sanlúcar; y su madre,
hija de Santiago Franzón Gilardón y Concepción Vicenti Botini. Éste último tuvo
fábrica de fideos y almidón en Sanlúcar y era hijo, a su vez, del genovés
Benito Franzón Bianchi. José Eduardo tuvo siete hermanos, que fallecieron sin
descendencia. Éstos fueron Santiago (1879-1880); Concepción (1880-1923),
soltera; María Clara (1883-1898), que falleció muy joven; Elena (Sor Guadalupe)
(Sanlúcar, 1885-Jerez de la Frontera, 1969), religiosa dominica en el convento
de Jerez de la Frontera; Eduarda (1890-1933), soltera; Miguel (1896-1920),
soltero; y Teresa (Sanlúcar, 1893-Jerez de la Frontera, 1975), soltera, quien vivió
con su hermano, el presbítero José E. Lagomazzini Franzón, hasta que murió,
cuando marcho a vivir al convento de las dominicas de Jerez, donde estaba su
hermana Elena. Sobre la genealogía e historia de la familia Franzón en
Sanlúcar, se puede consultar en este blog “Genealogía e historia de la familia Franzón de Sanlúcar de Barrameda”.
El
padre de José Eduardo, José Lagomazzini Mariscal, falleció en 1918, a los 68
años de edad, en la “Huerta de En Medio”, también llamada popularmente “Huerta
de Joselito”. Se le hizo funeral de la Hermandad del Carmen. Su madre, Carmen
Franzón Vicenti, fallecería poco después, en 1921, a los 65 años de edad, en la
misma huerta.[2]
De
la toma de los Santos Sacramentos y el fallecimiento del padre del presbítero
José E. Lagomazzini, dio buena cuenta El
Correo de Cádiz, en su sección de noticias de Sanlúcar:
“Santos
Sacramentos. A petición propia le han sido administrados los Santos Sacramentos
al respetable señor padre del notabilísimo poeta D. José E. Lagomazzini
Franzón, coadjutor de la parroquia de Santo Domingo”.[3]
“Necrología.
Ayer por la mañana entregó su alma a Dios, fortalecido con todos los auxilios
de nuestra sacrosanta religión, tras prolongada y penosa dolencia, sobrellevada
con ejemplar resignación cristiana, el que fue muy respetable y anciano
convecino el Sr. D. José Lagomazzini Domínguez [Mariscal] (q.a.g.g.), padre del
virtuoso sacerdote y laureado poeta D. José Eduardo Lagomazzini Franzón,
coadjutor de la parroquia de Santo Domingo. Reciba el hijo del finado y demás
distinguida familia, nuestro más sentido pésame. El Corresponsal. (10-2-1918)”.[4]
Esta
familia vivió siempre en las huertas existentes en el margen derecho de la actual
calle San Francisco. En 1905 residían en calle San Francisco, nº 5, en la
denominada “Huerta de En Medio”, que fuera propiedad del presbítero Miguel
Franzón Vicenti, tío del padre Lagomazzini. Respecto a los avatares de esta
huerta se puede consultar el correspondiente apartado en este artículo.
En
los años 70 del siglo XX, sobre el solar de lo que había sido la “Huerta de En
Medio”, lugar de residencia del presbítero José E. Lagomazzini Franzón, se
construyeron bloques de viviendas y el Ayuntamiento rotuló una de las nuevas
calles de esta urbanización con el nombre de “Padre Lagomazzini”, en honor de
este sacerdote y poeta sanluqueño, tal como se conserva en nuestros días.
Estudios elementales y
eclesiásticos
José
Eduardo Lagomazzini Franzón realizó sus primeros estudios en el colegio de los Padres Escolapios de
Sanlúcar. Años después, siendo sacerdote y conocido poeta, dedicó unos versos a su antiguo colegio, con motivo de la celebración de lo los cincuenta años de la llegada de los escolapios a Sanlúcar:
Lagomazzini Franzón cursó la enseñanza media y Bachillerato en el Instituto General Técnico de Jerez de la Frontera, aunque se preparaba en Sanlúcar[5]. Ya entonces se reveló como alumno aventajado. Así lo demuestran sus excelentes calificaciones, algunas de las cuales fueron publicadas en el periódico El Guadalete de los años 1904 y 1905: en 1904 se reseñan en esta publicación los “Alumnos que en los exámenes de enseñanza privada verificados en el Instituto (de Jerez) han obtenido las primeras calificaciones”: José Lagomazzini y Franzón obtuvo Sobresaliente en las asignaturas de “Psicología y Lógica” y “Fisiología e Higiene”. Este curso, José Eduardo fue compañero de Manuel Rubio Alpresa, Eduardo Cotro Florido y José Delgado Ñudi, entre otros sanluqueños, que también obtuvieron notables calificaciones[6].
En un solemne acto celebrado en el Instituto de Jerez, con motivo de la apertura del curso 1905-1906, al que asistió el alcalde jerezano, Julio González Hontoria, se entregaron los premios correspondientes a los alumnos que habían obtenido Matrículas de Honor el curso anterior. Entre ellos se hallaba José Lagomasini (este apellido aparece con distinta ortografía en los diversos documentos y publicaciones) y Franzón, que consiguió la calificación de Sobresaliente y Matrícula de Honor en la asignatura “Ética y Rudimentos de Derecho” (la misma nota en esta asignatura lograron los alumnos Eulalia Leal y Macedo y Manuel Illanes del Río). Durante aquel curso académico, otros tres sanluqueños, procedentes del colegio de las Escuelas Pías de Sanlúcar, obtuvieron igual calificación de Sobresaliente con derecho a Matrícula de Honor: Francisco España Viejo (Nociones de Aritmética y Geometría), quien también sería sacerdote en Sanlúcar, encargado de la iglesia de San Nicolás; José Delgado Ñudi (Aritmética) y Manuel Barba Brun (Psicología y Lógica).[7]
Con diecisiete años, José Eduardo Lagomazzini solicitó ingresar en el Seminario de Sevilla, en septiembre de 1905, alegando que ya tenía cursados los estudios de bachillerato, siéndole concedida la admisión por el Rector. Abonó los derechos de examen (2,50 pesetas), realizó el examen de incorporación al Seminario el 30 de septiembre y obtuvo la calificación de “Méritus”. Una vez admitido en calidad de alumno interno, se le asignó como tutor a Joaquín Moreno.[8]
Entre 1905 y 1911, Lagomazzini Franzón cursó los estudios eclesiásticos en el Seminario Metropolitano de Sevilla, obteniendo la licenciatura en Sagrada Teología.[9] Además, entre 1911 y 1914 se graduó en Derecho Canónico en el mismo Seminario con excelentes calificaciones.[10]
DE
OTRA EDAD
“Pequeño poema, evocación de mis
tiempos de alumno en el colegio calasancio de Sanlúcar de Barrameda, dedicado a
los Padres Escolapios de esta Ciudad, en las bodas de oro de la fundación de
este centro docente.”
I
EL
PATIO DE LAS PALMERAS
(ANOCHECER)
¡Qué
placidez al contemplarte siento!
Lejos
del mundo y su falaz mentira
tu
augusta calma el trovador aspira.
Y
tu ambiente de paz le infunde aliento.
El
ocaso resbala manso y lento,
mi
fatigado corazón respira,
y
tus palmas parecen una lira
que
tañe melodiosa el manso viento.
Yo
aspire de tus flores la fragancia
en
los ingenuos años de mi infancia,
en
la risueña edad de mis quimeras...
Mi
frente era más pura que el armiño,
y
en mi sereno corazón de niño
más
alta era mi fe que tus palmeras.
II
La Salve de los
sábados
¡Oh
páginas henchidas de ternura,
cuadros
llenos de luz y de colores
de
otro tiempo mejor, evocadores
de
mi primera edad, toda ventura...!
Con
nuestra voz de celestial dulzura
cantamos
a la Virgen sus loores
como
infantiles bardos trovadores
de
la madre de Dios, bendita y pura.
Me
aleje de mi pueblo idolatrado
y
volví con el pecho lacerado;
entré
en el templo de la Escuela Pía,
Y
vi a los niños, y lloré a raudales
a1
escuchar sus voces celestiales
que
la Salve cantaban a María.
Lagomazzini Franzón cursó la enseñanza media y Bachillerato en el Instituto General Técnico de Jerez de la Frontera, aunque se preparaba en Sanlúcar[5]. Ya entonces se reveló como alumno aventajado. Así lo demuestran sus excelentes calificaciones, algunas de las cuales fueron publicadas en el periódico El Guadalete de los años 1904 y 1905: en 1904 se reseñan en esta publicación los “Alumnos que en los exámenes de enseñanza privada verificados en el Instituto (de Jerez) han obtenido las primeras calificaciones”: José Lagomazzini y Franzón obtuvo Sobresaliente en las asignaturas de “Psicología y Lógica” y “Fisiología e Higiene”. Este curso, José Eduardo fue compañero de Manuel Rubio Alpresa, Eduardo Cotro Florido y José Delgado Ñudi, entre otros sanluqueños, que también obtuvieron notables calificaciones[6].
En un solemne acto celebrado en el Instituto de Jerez, con motivo de la apertura del curso 1905-1906, al que asistió el alcalde jerezano, Julio González Hontoria, se entregaron los premios correspondientes a los alumnos que habían obtenido Matrículas de Honor el curso anterior. Entre ellos se hallaba José Lagomasini (este apellido aparece con distinta ortografía en los diversos documentos y publicaciones) y Franzón, que consiguió la calificación de Sobresaliente y Matrícula de Honor en la asignatura “Ética y Rudimentos de Derecho” (la misma nota en esta asignatura lograron los alumnos Eulalia Leal y Macedo y Manuel Illanes del Río). Durante aquel curso académico, otros tres sanluqueños, procedentes del colegio de las Escuelas Pías de Sanlúcar, obtuvieron igual calificación de Sobresaliente con derecho a Matrícula de Honor: Francisco España Viejo (Nociones de Aritmética y Geometría), quien también sería sacerdote en Sanlúcar, encargado de la iglesia de San Nicolás; José Delgado Ñudi (Aritmética) y Manuel Barba Brun (Psicología y Lógica).[7]
Con diecisiete años, José Eduardo Lagomazzini solicitó ingresar en el Seminario de Sevilla, en septiembre de 1905, alegando que ya tenía cursados los estudios de bachillerato, siéndole concedida la admisión por el Rector. Abonó los derechos de examen (2,50 pesetas), realizó el examen de incorporación al Seminario el 30 de septiembre y obtuvo la calificación de “Méritus”. Una vez admitido en calidad de alumno interno, se le asignó como tutor a Joaquín Moreno.[8]
Entre 1905 y 1911, Lagomazzini Franzón cursó los estudios eclesiásticos en el Seminario Metropolitano de Sevilla, obteniendo la licenciatura en Sagrada Teología.[9] Además, entre 1911 y 1914 se graduó en Derecho Canónico en el mismo Seminario con excelentes calificaciones.[10]