Desde el templo del Lucero

sábado, 27 de abril de 2013

Protagonistas en la Sanlúcar de los años 80 (II). Gonzalo Martínez Sadoc. Pregonero del Carnaval-87



En esta sección recupero una serie de entrevistas, realizadas entre 1987 y 1989, a destacadas personas de la cultura, la sociedad y la política en Sanlúcar de Barrameda. Publicadas en el periodico El Semanal
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El Semanal, 12 de marzo de 1987; p. 16.



Gonzalo Martínez Sadoc. Pregonero del Carnaval-87

 

 
El poeta sanluqueño, en su pregón, habló de los orígenes del Carnaval, comparó los rincones más típicos sanluqueños y a sus gentes con los de la Grecia clásica, haciendo una referencia constante a la mitología, a sus dioses y héroes, y por último recordó, ayudándose de múltiples anécdotas, el carnaval de Sanlúcar, allá por los años veinte y treinta.

¿Qué significado tiene la poesía para Gonzalo Martínez Sadoc?

- “La poesía es un reflejo de los sentimientos que uno ha acumulado durante muchos años y que procura expresarlo, mediante versos, de la manera más bella posible, para satisfacción propia y para satisfacción de la gente que ama la poesía".

Martínez Sadoc, en su texto pregonado, hizo constantes alusiones a la mujer, siempre cantando líricamente la hermosura de sus formas y su intrínseca feminidad, porque el lema principal de su poesía “es la belleza en general, pero mi musa principal es la mujer y el amor".

Su vocación literaria le llega muy temprano: "Ya a los doce o trece años comienzo a hacer versitos a los compañeros metiéndome con ellos, comentando algunos sucesos, etc. Más tarde, en el bachillerato me atrae profundamente la poética y comienzo a leer a los clásicos que más han influido en mi poesía, como a Lope de Vega, Calderón, Quevedo y Espronceda". De entre los poetas modernos, Sadoc destaca a García Lorca, a los hermanos Machado, pero sobre todo a Miguel Hernández "al que le tengo un cariño especial, porque me parece que fue un poeta que se frustró muy pronto, pero que podía haber llegado muy alto en el ámbito de la poesía española y mundial".

Tras la guerra, Gonzalo se autoexilia primero a Francia y luego a México, donde va a vivir treinta y un años: "Yo conocía lo que estaba ocurriendo en Sanlúcar. Habían fusilado a muchos amigos míos, que yo estimaba, que eran inocentes y que no tenían más delito que el de haber pertenecido a una agrupación política. Ante estos hechos preferí correr los riesgos del exilio, porque decidí pasar malos tiempos, pero con la esperanza de que vinieran tiempos mejores, como así ha sucedido".

Y estos tiempos mejores llegaron para el poeta en el año 1968, cuando viene a Sanlúcar sólo para hacer una visita, pero "el recibimiento tan cariñoso que me hicieron me hizo ver que, a pesar de los años transcurridos, se acordaban de mí y me recordaban con cariño, por lo que tomé la decisión de regresar, y en el año 1970 vuelvo definitivamente a España con toda mi familia".

lunes, 15 de abril de 2013

Protagonistas en la Sanlúcar de los años 80 (I) La Sallago: un mito del cante.




En esta sección recupero una serie de entrevistas, realizadas entre 1987 y 1989, a destacadas personas de la cultura, la sociedad y la política en Sanlúcar de Barrameda. Publicadas en el periódico El Semanal.

El Semanal, 10 de abril de 1987



La Sallago: un mito del cante



Foto: Mariqui Romero
 
“Hay que amarrarse los cordones de los zapatos pa cantar con La Sallago”, dijo Caracol de la Soraya, como él la llamaba”. De él dice Encarnación que es lo más grande y que “no se le ha hecho justicia".
Grande era Caracol y grande es Encamación Marín "La Sallago", porque en los círculos del cante se cuenta con ella, para que forme parte de esos pocos "grandes" del flamenco español. "Ahora me están llamando de todos los sitios", pero La Sallago ya no va a todos porque está cansada, porque son ya 69 años de vida, sentimiento y desengaño, porque ahora ya puede seleccionar y pasar de hacer "homenajes de balde". Porque ya no tiene los 29 años con que empezó a cantar en público "por todos lados, de balde y esmayaíta por una poquita de comida". Porque ella ya sabe que "la gente que yo creía que eran amigos y amigas me hicieron perrerías".
Nace en el Barrio, su Barrio, donde "vive la nobleza más grande del mundo. Que contestamos a destiempo... Que hacemos cosas a destiempo... pero allí todo corazón es bueno". Y se cría "a marcha", pero con mucha alegría, escuchando el compás de su madre y el de su padre también, aunque no lo conoció: "En mi casa cuanta más hambre teníamos y más fatigas, mas compás teníamos. Y mi madre nos decía: No pedid limosna. A vender pescaíto. Y tú a vender esas galeras". Y la gente preguntaba ¿Qué pasa en casa de La Sallago? Y es que la madre de Encarnación, con ella y sus hermanos estaban cantando. 
Acaba de volver de Madrid, de actuar junto a los mejores del cante. El viernes pasado le tocó a Sanlúcar, después de muchos años de no escuchar su garganta. Y la Peña "Puerto Lucero" se abarrotó de gente para oir a la Sallago y a "Ramito". Le aplaudieron, se emocionaron, le gritaron: ¡Ole Sallago! ¡Venga, Encamación, qué tú eres la mejor! Ella llegó sola, desapercibida, pequeñita, con mucha fuerza. 
El sentimiento interpretado, el dolor hacia fuera, las alegrías más hondas. ¿Cómo se hace este cante Encamación? -"Yo canto mi historia, mis cosas, lo mío, mis tristezas y mis disgustos, mis contratiempos, esas puñalás que se da la familia sin saber por qué. Esas cosas las digo yo cantando. Nunca canto lo que me digan o lo que me escriben, sino que me voy inventando, la letra y la música, porque si yo canto lo que cantó Caracol, que es para mí el primero, o lo que cantó Mairena, que es jamón serrano, o lo que canta la Paquera o la Niña de los Peines, que es la más grande, pues entonces no soy La Sallago".

lunes, 24 de diciembre de 2012

No dar explicaciones

 
Opinión. Patrimonio Histórico de Sanlúcar de Barrameda. 
 
 
 
Junto a la mentira y la omisión de información, que es otra forma de mentir, se ha impuesto entre la clase política el hecho de no dar explicaciones sobre cualquier asunto que interese y afecte a los  ciudadanos. Estas tres estrategias, junto a las innumerables formas de corrupción, han alejado definitivamente a la gente de sus gobernantes. En consecuencia, la falta de credibilidad en los representantes públicos se ha generalizado más allá de todo límite soportable, o lo que es lo mismo, a buen entendedor pocas palabras bastan: búscate la vida que nadie de los que votaste te va a ayudar.

Me pregunto a qué se deberá esta insufrible tendencia a la mentira, de forma más o menos solapada, y esta sistemática falta de explicaciones sobre lo que verdaderamente ocurre en las ciudades. Como respuestas sólo se obtienen de los políticos un mar de subterfugios, que dan pábulo a todo tipo de rumores y confusiones entre la ciudadanía.

Este miedo a declarar la verdad se ha instalado férreamente entre los políticos. Quizá porque piensen que reconocer errores, expresar impotencias o confesar debilidades en la gestión pública les restará votos en sus próximas campañas: su principal preocupación. Y hasta parece darles resultado, a pesar de los muchos clarividentes vecinos. Así las cosas, nada se hace por derecho, las promesas se incumplen de forma descarada y reiterada y ellos se mantienen en sus sillones.

Estas negligentes actitudes sitúan a todos estos políticos al otro lado de la integridad moral. Y de ello sólo parece darse cuenta, de vez en cuando, un avergonzado rey como Juan Carlos I o algún que otro político honesto y dimisionario.

Un buen ejemplo de este lamentable fenómeno es la situación en que se halla la denominada “Casa del Carril” de Sanlúcar de Barrameda. Anoche, 23 de diciembre, un grupo de ciudadanos decidieron vestir de navidad a esta preciosa y preciada casa del siglo XVII, cosida a puntales desde hace seis años, al tiempo que se cortaba al tráfico el Carril de San Diego, donde se ubica el inmueble, una de las más céntricas calles de Sanlúcar, con la consiguiente problemática para los vecinos, comerciantes de la zona y obstaculización del tráfico rodado.

Una casa protegida que el constructor de turno pretendía derribar para edificar sustanciosos pisos, allá por el boom inmobiliario, a cuyo especulativo fin se opuso la Consejería de Cultura de la Junta, dictaminando que no se podía demoler por ser un edificio histórico protegido, según la normativa vigente. El propietario apeló a los tribunales este dictamen y ante la eminente peligrosidad -eso dijeron aunque algunos nunca lo creímos-, el propietario, en unión de la Gerencia de Urbanismo, optaron por apuntalar el inmueble de forma tan agresiva que tuvieron que cortar la calle al tráfico por alcanzar los puntales la acera y el muro fronteros. Probablemente una forma de presión para forzar el derrumbe que no surtió los efectos deseados. Y así llevamos seis años. La explicación que corre por la ciudad: la justicia es muy lenta.

De lo que se trata es de echar la culpa a otro. La Alcaldesa, Irene García Macías, y sus compañeros del PSOE-CIS participan y abusan de esta otra manida tendencia. La culpa de la Casa Arizón la tuvo la anterior alcaldesa; la culpa del Mercado, la crisis y los recortes del PP; la culpa de la lamentable situación del palacio municipal, el gobierno central… al tiempo que la Alcaldesa se va de rositas, rumbo al Everest, a dirigir su partido en la provincia y a formar parte de la ejecutiva regional. Mucho quiero, poco abarco.

Después de recogidas de firmas de los vecinos, manifestaciones colectivas junto a la casa, pancartas reivindicativas colgadas en la valla protectora, chistes jocosos que corren por Facebook ridiculizando a la Alcaldesa (“el jardín de Inere” en ralación al foco de basura creado), protestas de asociaciones como Aula Gerión, a la que se le ocurrió preguntar por la situación de esta Casa en un Consejo de Urbanismo, hará unos cinco años sin obtener explicación alguna. Desde aquel entonces aquel Consejo “tan participativo” dejó de reunirse hasta el día de hoy, también sin más explicaciones.

Ni la Alcaldesa ni concejal alguno se ha puesto delante de una cámara para dar explicaciones a los ciudadanos sobre este asunto, que tanto afecta a los intereses económicos y patrimoniales de Sanlúcar y que se ha convertido en todo un símbolo de la nefasta gestión municipal del PSOE-CIS.

Mientras, un gabinete jurídico municipal, que no ha sido capaz o no ha querido agilizar e impulsar un procedimiento judicial que afecta a los intereses públicos y que sigue el propietario de la Casa del Carril, a la sazón tío de una concejala, y la Consejería de Cultura por denegar el derribo. Ni buscan ni consiguen solucionar el problema.
 
 
 
 
Lo último, anoche, un “alumbrado extraordinario” y reivindicativo para esta hermosa casa de cargadores a Indias, unos villancicos enlatados, un grupo de ciudadanos, cabreados y pacíficos, con gorros de papa Noel y velas encendidas que intentan alumbrar las maltrechas conciencias políticas.

Para colmo, esta Alcaldesa que incumple todas sus promesas, al modo Rajoy, y no ofrece explicaciones de nada, nos deja esta mañana un bonito lecto-mensaje de Navidad, al más puro estilo monárquico y a través de esos mismos medios de comunicación locales, subvencionados por el municipio y que nada quieren saber de “alumbrados extraordinarios”, donde la máxima autoridad de la ciudad nos desea prosperidad a todos los sanluqueños. Por cierto, el publiomensaje también se está repitiendo machaconamente durante todo el día en la SER. ¿Cuánto nos habra costado la cuña?

En fin, amigos, el cinismo de los que evaden las explicaciones tiene caras y tiene nombres.


Ana Gómez Díaz-Franzón
 

Más información sobre la Casa del Carril: http://www.gerionsanlucar.com/indice.html
 



 

lunes, 29 de octubre de 2012

Publicada la historia de Estella del Marqués

Recientemente he publicado el trabajo de investigación titulado Estella del Marqués. Un pueblo de colonización agrícola (1954-1967) en Jerez de la Frontera (Cádiz).

La publicación aborda la creación y evolución del pueblo Estella del Marqués, actual EATIM de Jerez de la Frontera, que fue construido como nueva población por el Instituto Nacional de Colonización entre 1954, fecha en que se aprobó el proyecto, hasta 1967, cuando se liquidaron las obras. Junto a otros nuevos pueblos, Estella forma parte de un conjunto de núcleos agrícolas implantados en la Zona Regable del Guadalcacín, situada en el extenso término de Jerez, al objeto de poner en regadío estas tierras y cubrir el despoblado existente entre este sector oriental del término de Jerez y la serranía gaditana.

El estudio, elaborado en 1994, se fundamenta principalmente en la documentación existente en el Archivo Histórico Provincial de Cádiz, además de otras fuentes. En el trabajo se describe el proceso de construcción del pueblo, según proyecto del arquitecto Fernando Cavestany, para instalar a 120 colonos -88 con viviendas y parcelas agrícolas y 32 jornaleros agrícolas sin parcela-, provenientes de las zonas próximas más desfavorecidas, como las comarcas gaditanas de la Sierra o La Janda.

De igual modo, en la publicación se da cuenta de la evolución experimentada por la población de Estella del Marqués desde sus orígenes, con la llegada de los diez primeros colonos a la finca Dehesa de los Potros, así como de sus principales actividades económicas, con especial atención a la agricultura (tipos de cultivo, la parcela, lote-pilote, lotes complementarios, lotes de riego por aspersión, etc.), la estructura urbana, tipos de viviendas, edificios públicos, infraestructuras, etc.

Estos contenidos sobre Estella del Marqués se completan con una serie de planos, fotografías y tablas, en las que se ofrece al lector información detallada sobre los diversos temas tratados. El libro, en edición electrónica (versión Kindle), ha sido publicado en amazon.es.


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